BUENOS DÍAS.

Nos invito de nuevo a tu cama.
Con sus despertares cálidos pero tentadores.
Así es como te recuerdo en la mañana, siempre
con esa ración de besos de la cual es apenas imposible escapar.
Aunque no tengo claro tampoco que quisiese hacerlo.
Con mirada aún dormida y besos húmedos como el café matutino,
ese que va acompañado con el periódico, que, como tú, tiene
 muchas historias que contar.



HOY ME APETECE
 JUGAR 
CON MI ALGO 
Y TU NO SÉ QUÉ

ARENA Y SAL.

Y entonces pongo los pies en la tierra de nuevo
y vuelvo junto a ti.
Te encuentras aquí junto a mí sonriendo, perteneciéndome.
Es curioso cómo pongo los pies sobre la tierra de nuevo
 para sumergirme en un limbo contigo, donde se para el tiempo
 y se olvida el resto.



FAMILIAR RENDICIÓN,TÍPICA TENTACIÓN.

Y preparar diversas películas.
Uno, dos, y hasta cuatro DVDs apilados.
Las palomitas, de microondas.
Todo, para acabar tú perdido en mi cuerpo, y yo
 rendida ante tu perdición.
Tus labios prometiendo mis deseos y el olor de tu piel
haciéndome bailar.
Todo, para acabar las películas como casi siempre,
enredados en tu cama.


Del verbo QUERER.

Y estoy lista para acostarte, acostarte en el lado de mi mente
 reservado a lo especial, en la nube entre el ocaso y la mañana.
Acostarte con cuidado para que nada se rompa.
Trazar tu cama con mis dedos, y que te quedes.